La función 𝑔(𝑥) =𝑥𝑒𝑥 es continua.
Por el teorema fundamental del cálculo, la función
𝐺(𝑥)=∫𝑥0𝑔(𝑡)𝑑𝑡=∫𝑥0𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡
es derivable, con 𝐺′(𝑥) =𝑔(𝑥).
De esta forma, podemos escribir
𝑓(𝑥)=1+∫𝑥0𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡=1+𝐺(𝑥).
Para estudiar la curvatura de la función 𝑓 tenemos que hallar su segunda derivada.
𝑓′(𝑥)=𝐺′(𝑥)=𝑔(𝑥)=𝑥𝑒𝑥,𝑓″(𝑥)=𝑔′(𝑥)=𝑒𝑥+𝑥𝑒𝑥=𝑒𝑥(𝑥+1).
Hallamos los candidatos a puntos de inflexión igualando la segunda derivada a cero.
𝑓″(𝑥)=0⇔𝑒𝑥(𝑥+1)=0⇔𝑥+1=0⇔𝑥=−1.
Así que el único candidato a punto de inflexión tiene abscisa 𝑥 = −1.
Estudiamos el signo de 𝑓″ para determinar si 𝑓 es cóncava o convexa.
- Si 𝑥 < −1, 𝑓″(𝑥) <0.
Así que 𝑓 es cóncava en ( −∞, −1).
- Si 𝑥 > −1, 𝑓″(𝑥) >0.
Así que 𝑓 es convexa en ( −1, +∞).
Por tanto,
𝑓 tiene un punto de inflexión en
𝑥 = −1.
Su imagen viene dada por
𝑓(−1)=1+∫−10𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡=1+∫−10𝑔(𝑡)𝑑𝑡.
En primer lugar, hallamos una primitiva de la función 𝑔.
Resolvemos la integral por partes.
𝑢=𝑡⇒𝑢′=1,𝑣′=𝑒𝑥⇒𝑣=𝑒𝑥.
Entonces:
∫𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡=𝑡𝑒𝑡−∫𝑒𝑡𝑑𝑡=𝑡𝑒𝑡−𝑒𝑡=𝑒𝑡(𝑡−1).
Calculamos la integral definida.
∫−10𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡=[𝑒𝑡(𝑡−1)]−10=−2𝑒−1+1.
Por tanto,
𝑓(−1)=1+∫−10𝑡𝑒𝑡𝑑𝑡=1−2𝑒−1+1=2−2𝑒.
Así que el punto de inflexión es (−1,2−2𝑒).